Los 400 km que separan Pushkar de Agra se hacen infernales, un tramo de autopista se encuentra cortado por manifestaciones, y tenemos que desviarnos por caminos de montanya, durante 4 horas para hacer 40 km.
Despues de muchas horas, pocos kilometros antes de llegar a Agra pasamos por Fathepur Sikri una ciudad de una gran riqueza arquitectonica, hacemos una pequenya parada y continuamos.
Por fin llegamos a Agra, aunque es muy de noche notamos su presencia, nuestra guest house esta a menos de 200m de el, cuando vamos a cenar desde la azotea podemos ver su silueta, pone los pelos de punta!!
Cenamos y nos vamos a dormir, ha sido un viaje largo. Por la manyana los mas de 45 grados no nos permiten visitar nada y nos quedamos descansando hasta el atardecer cuando cruzando hacia la otra parte del rio, visitamos el Taj Mahal por detras, pudimos apreciar su cambio de color.
A la vuelta al hotel, el rickshaw con tal de ensenyarnos un par de tiendas de marmol para sacarse algunas rupias solo teniendonos ahi metidos durante 2o minutos en cada una, para finalmente no comprar nada, nos llevo gratis. Cenamos otra vez viendo su silueta, nos acostamos temprano. A las 5 a.m en pie, para por fin entrar y verlo cara a cara.
Compramos las entradas: precio indio 3o centimos, precio turistico 12 euros!!! Pero por lo menos nos dieron un agua (caliente).
Nos dirijimos a la entrada y al cruzarla ahi estaba, majestuoso.
Las fotos dejan ver su belleza, pero cuando estas frente a el, te congelas a 45 grados.
La atraccion es brutal, llega la hora de irse pero siempre necesitas contemplarlo por ultima vez, una vez mas. Al irte la sensacion es extranya, entre la pena y la alegria.
La primera por no volver a verlo y la segunda por haber disfrutado con todos los sentidos de una de las maravillas del mundo.
Esta visita la compartimos con nuestros nuevos amigos espanyoles Marta y Julio de Madrid.
Despues del Taj vamos a ver el fuerte de Agra.
Lo mas destacable las lejanas vistas del Taj Mahal.
Despues de la ruta turistica comemos en McDonals y paseamos por un centro comercial deshabitado. Despues a hacer las maletas hoy tenemos un tren que coger y no se nos puede volver a escapar.
Ya en la estacion con mucho tiempo de antelacion, en poco rato animales e indios nos rodeaban sin quitarnos ojo de encima.
Pasan las horas y nos acercamos al anden donde encontramos de nuevo a Julio y Marta que nos libran de la pesada espera y nos abastecen de medicamentos (farmaceutica ella), pues el tren se retrasa, pasamos el rato charlando hasta que por fin llega!
Nos vamos hacia...
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
las fotos del taj-majal son impresionantes. Se me hace muy extraño veros alli! un saludo!
ResponderEliminarIncreíble............... supongo que no podréis expresar con palabras lo que habéis visto ahí...
ResponderEliminarMe ha encantao!
ResponderEliminarYa veo q aparte de conocer gente indiana conoceis a gente autóctona de España! jajaja
Rat q chulos os pantalones y la faldita!
estais guapisimos!!
un beso!