La presencia de nuestros amigos nos libraba del acecho de los cientos de taxistas que aguardaban la llegada de los diferentes vuelos intercontinentales que a esa hora se acumulan.
Ya en su coche atravesamos la ciudad serpenteando entre vacas y rickshaws, a alta velocidad, Amol demostró sus grandes dotes como conductor y llegamos sanos y salvos a su casa.
La familia Sadh aun despierta nos esperaba. Amol nos presentó a su padre, madre, hijo, y su adorable mujer, Yoghita.
Tenían todo preparado, nos acomodaron en una bonita y acojedora habitación a la que no le faltaba ningún detalle.
Fue muy difícil conciliar el sueño, demasiadas emociones en muy pocas horas...
Al despertar, y mirar a nuestro alrededor nos encantó confirmar que no había sido un sueño, el desayuno indio estaba a punto (algo parecido a un estofado con curry). Nos sento de maravilla!!
Iniciamos el día subidos cada uno a una moto, Mireia en la postura tradicional india.
Fuimos a conocer de primera mano como, donde y quien elabora nuestros productos.
Fue gratificante confirmar lo que ya sabíamos.
Pasamos el día junto Amol planteando nuevas ideas y proyectos.
Después de un duro pero agradable día regresamos a casa, y allí disfrutamos de una magnífica cena en familia...
Qué aventura i qué pasada!! Poder estar con vuestros amigos de India, descubrir su cultura más de cerca y que os cuiden tanto!! Desde aquí no encanta ver que lo estáis disfrutando. Besitos y abrazos desde Barcelona.
ResponderEliminar